EL CLIMA

domingo, 16 de agosto de 2015

¿Que pasa con la basura tecnologica?



http://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0/

http://www.ecoportal.net/


Una vez te has parado a pensar qué ocurre con las toneladas de tecnología que el primer mundo desecha a diario? ¿Sabes dónde acaba la vida de los móviles viejos y las teles de culo gordo? Seguramente no: el brillo de lo nuevo nos desancla, automáticamente, de lo que queda atrás.

La mayoría de nuestra basura electrónica acaba en dos sitios. Dos enormes vertederos, dos pequeños infiernos, cada uno en una esquina del mundo y demasiado lejos como para que puedan quitarnos el sueño.




Uno de ellos es la ciudad de Guiyu, en Guandong, China, que lleva 20 años recibiendo residuos electrónicos. El sitio donde, de una forma u otra, cobran vida la mayoría de nuestros gadgets es también el que los recibe de vuelta cuando terminan su vida útil. Guiyu es el mayor basurero tecnológico de China, y aunque la fabricación y montaje de componentes electrónicos sea una industria del más alto nivel, su reciclaje y descomposición, definitivamente, es todo lo contrario. El apocalíptico paisaje de Guiyu muestra, hasta donde alcanza la vista, montañas de dispositivos electrónicos desechados entre rudimentarias chabolas callejeras a modo de taller, en las que los trabajadores, equipados solo con herramientas manuales, desmontan los componentes con métodos nada tecnológicos. Las bobinas de los transformadores se desenredan a mano para extraer el cable; las placas se introducen en hornos al rojo y se sumergen en ácido para conseguir escasas virutas de sus preciados metales.

Guiyu es el segundo lugar con más polución del planeta, y desde hace años se la conoce como Ciudad Veneno: el aire está saturado de gases tóxicos, y el suelo, envenenado con altas dosis de plomo, aluminio, cromo y otros metales pesados. Ni siquiera el agua es potable, por culpa de los altos niveles de plomo en el sedimento del río.

Personas trabajando en el vertedero de residuos electrónicos de Guiyu. (Foto: Basel Action Network (Ban.org) CC BY-ND 2.0 / Flickr)

El impacto medioambiental hace que el entorno, obviamente, sea de los menos saludables del planeta. La población de Guiyu sufre un altísimo índice de enfermedades de todo tipo: dolencias respiratorias y cutáneas, úlceras, migrañas… los niños de la ciudad muestran, en su mayoría, síntomas de intoxicación por plomo, y su nivel de inteligencia es sensiblemente menor a la media nacional.

China aprobó hace tiempo una ley prohibiendo la importación de residuos electrónicos, pero el daño ya estaba hecho. Aunque cada día siguen entrando toneladas de basura, el grueso de la exportación se ha ido moviendo hacia países con leyes más permisivas, como Ghana. La mayor parte de la basura tecnológica se disfraza para su exportación como donativos o material usado, cuando no es más que chatarra altamente tóxica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario