HUMOR GAY, ADVERTIMOS SOBRE CONTENIDO

HUMOR DE MARICAS CONTENIDO ADULTO Un hombre llega a hacer el censo nacional a una casa y al tocar la puerta le abre un gay. Como no se siente muy a gusto con los homosexuales, le pregunta si está su papá. El gay, después de notar la reacción del hombre del censo sobre su orientación sexual, le responde diciendo: - Te jodiste porque él también es gay. - ¿Y tu hermano? - Ese es el más maricón de la casa. Un tanto disgustado, el hombre del censo pregunta: - ¿Y es que en esta casa ha nadie le gusta las mujeres...? Y el gay le responde: - Sí… a mi hermana y a mi mamá. 2 Dos amigos se encuentran en la calle y uno le dice al otro: - Hola Antonio, cuanto tiempo sin verte, ¿cómo has estado? - Pues bien, imagínate que desde que me dejó mi novia me he comprado un cocodrilo del Amazonas que te chupa el pene mejor que cualquier mujer… es algo súper excitante. - Coño… eso tengo que verlo con mis propios ojos. - Ven, te invito a mi casa para que lo veas. Una vez en casa de Antonio… - Ya verás. Antonio silba y aparece corriendo un cocodrilo de 6 metros de longitud que empieza a chupárselo. Cuando este ya ha acabado, Antonio saca un zapato y empieza a golpearle la cabeza al cocodrilo para que pare. El cocodrilo se va corriendo y se esconde debajo de un armario. - ¡Increíble! Esto es fabuloso. - ¿Quieres probar tu un poco? - Bueno, ¡¡¡pero no me vayas a pegar muy fuerte con el zapato!!! 3 En la alcoba conyugal, la sensual esposa recibe al marido a las tres de la mañana diciéndole: - Desabrocha mi blusa y déjala sobre la cama. - Sí. - Ahora el sostén y ponlo en la silla. - Claro. - Deja mi falda en el ropero. - Bueno. - Ahora mis pantys en el cesto. - Ya está. - ¡Y que sea la última vez que te pones mi ropa, maricón de mierda! 4 Después de una larga y tendida sesión amorosa en el departamento de ella, el joven se da la vuelta, saca un cigarrillo y busca su encendedor. Como no lo encuentra, le pregunta a su compañera si tiene uno a la mano. - Debe haber algunos fósforos en el la mesa de noche, responde ella. El abre el cajón y encuentra la cajita de fósforos... al lado de la foto de un hombre. Naturalmente, el joven se preocupa y pregunta: - ¿Es tu esposo? - No, tontito, responde ella acurrucándose amorosamente. - ¿Tú enamorado? - No, para nada, dice ella, mordisqueándole la orejita. - Bueno, ¿quién es él, entonces?, pregunta el desconcertado muchacho. Serenamente, la chica responde: - Soy yo…antes de la operación.