toda mujer es bella
Falta poco, para que el 2011 pase al recuerdo y emerja un nuevo y sublime año, el 2012.
Puede ser un gran año lleno de progreso en tu vida, un año en el que lograrás alcanzar objetivos… pero para eso debes tenerlos.
Puedes escoger recibir el año “como venga” o pensar ya en lo que deseas lograr y decidirte a luchar por ello.
Eres mujer y si tú te pones un objetivo para el año que viene, ¿por qué no habrías de lograrlo?
Un nuevo año trae consigo un espacio nuevo para crear y generar los sueños postergados. Será el tiempo de hacer un balance, de lo que hicimos o no hicimos durante el año, y comenzará la lista a llenarse con nuevas esperanzas. Adelgazar, acomodar los armarios, aprender italiano, cambiar de guardarropas, hacer ese viajecito; volver al gimnasio, visitar a las amigas, incorporarnos al mercado laboral, y muchos otros tantos más; podrán ser nuevos íconos que te motiven para encender tu motor cada día del año próximo.
Sin embargo; es esencial que aprendas a declarar tus metas para no jugarte una mala pasada.
¿Qué son las metas?Una meta es un sueño deseado al que le agregamos acción para alcanzarlo. Esa acción es una acción efectiva. Una acción que sea congruente con lo que deseamos alcanzar. Pero no sólo necesitamos de la acción, también es importante generar una actitud correspondiente. Acción efectiva más actitud positiva es igual a éxitos.
¿Por qué algunas metas son difíciles de alcanzar?Porque nuestra interpretación es escasa. Quiero decir, que “queremos las cosas de primera vez y sin trabas” y cuando no se suceden así, protestamos y nos sentimos víctimas del mundo, y por consiguiente abandonamos. La falta de perseverancia es la que hace que el camino sea “difícil”. Pero permítete comenzar a observar que las cosas no son ni fáciles ni difíciles, que simplemente son; y verás que un cambio en tu mirada, te facilitará el camino.
¿Reacción o pro-actividad? La mayoría de las veces declaramos las metas diciendo lo que no queremos, es decir por la forma negativa, en lugar de hacerlo hacia el lugar deseado. La reacción tiene una carga negativa desde lo emocional, no es lo mismo decir “no quiero ser gorda por eso voy a adelgazar” que establecer “adelgazaré 6 kilos”. Imaginarnos ya en el presente en el estado deseado nos estimulará a seguir en el proceso de convertirnos en las mujeres que queremos ser.
Haz tu lista y aspira el aire de gloria.No abandones aun cuando sea complicado; la vida es un hermoso laberinto, juega en él. Aprende, alimenta a tu alma de experiencias positivas.
Sin embargo; es esencial que aprendas a declarar tus metas para no jugarte una mala pasada.
¿Qué son las metas?Una meta es un sueño deseado al que le agregamos acción para alcanzarlo. Esa acción es una acción efectiva. Una acción que sea congruente con lo que deseamos alcanzar. Pero no sólo necesitamos de la acción, también es importante generar una actitud correspondiente. Acción efectiva más actitud positiva es igual a éxitos.
¿Por qué algunas metas son difíciles de alcanzar?Porque nuestra interpretación es escasa. Quiero decir, que “queremos las cosas de primera vez y sin trabas” y cuando no se suceden así, protestamos y nos sentimos víctimas del mundo, y por consiguiente abandonamos. La falta de perseverancia es la que hace que el camino sea “difícil”. Pero permítete comenzar a observar que las cosas no son ni fáciles ni difíciles, que simplemente son; y verás que un cambio en tu mirada, te facilitará el camino.
¿Reacción o pro-actividad? La mayoría de las veces declaramos las metas diciendo lo que no queremos, es decir por la forma negativa, en lugar de hacerlo hacia el lugar deseado. La reacción tiene una carga negativa desde lo emocional, no es lo mismo decir “no quiero ser gorda por eso voy a adelgazar” que establecer “adelgazaré 6 kilos”. Imaginarnos ya en el presente en el estado deseado nos estimulará a seguir en el proceso de convertirnos en las mujeres que queremos ser.
Haz tu lista y aspira el aire de gloria.No abandones aun cuando sea complicado; la vida es un hermoso laberinto, juega en él. Aprende, alimenta a tu alma de experiencias positivas.
Elige metas que realmente quieras llevar a cabo desde tu corazón.
Práctica reconocerte cada vez que llegas a tu objetivo
Anota en un cuadernito “la emoción que experimentaste” así vas creando un registro emocional que te impulse a seguir trabajando
Recuerda el por qué esa meta es importante para ti
Cuando sientas flaquear, preguntante “ qué ganas si no lo haces, y cuánto pierdes”
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