EL CLIMA

sábado, 1 de enero de 2011

Segun la pagina de entre mujeres, estas fueron las PEOR VESTIDAS del año 2010.





Lo decían nuestras abuelas: aunque la mona se vista de seda, mona queda. Dinero para comprar los mejores diseños, les sobra. Tiempo para elegir y probarse prendas, calzados y joyas, también. Lo que les falta es estilo, elegancia, glamour y capacidad de autocrítica para optar por outfits que les sienten.
Algunas pertenecen al mundo de la música, otras al del cine y la actuación y las demás, simplemente, entran en esa categoría amplia e indefinida de mediáticas y “eventeras” sin demasiado talento aparente. Aquí están, estas son… ¡Las peor vestidas del 2010!
Lady Gaga. Indiscutido primer premio. Si bien la revista
Vogue la designó “la gran visionaria de la moda” gracias a su osadía al momento de elegir un vestuario extravagante y decididamente futurista, la cantante traspasa todo límite y, habitualmente, parece “disfrazada”. La mezcla de colores estridentes, el abuso de las medias de red rotas y los body, los cortes rígidos y extravagantes que poco la benefician, un vestido hecho de carne y el estilismo del exceso que la caracteriza sumaron puntos para que alcanzara el podio casi sin competencia.
Katy Perry. Sobredosis de minifaldas, brillos y transparencias. Es raro verla abajo del escenario con un vestido que llegue un poco más debajo de la cola. Y si a eso le sumamos escotes pronunciados, encajes, estampados exóticos (hasta se la vio con un solero rojo que imita un ticket) y una peluca azul… ¡Segundo puesto merecido!
Ke$ha. Se perfila como la nueva star del mundo pop. Y casi como no podía ser de otra manera desde Madonna en adelante, se viste mal. Mucho negro, poca ropa, un look descuidado y provocador con labios demasiado colorados. Dicen que tiene talento y creatividad a la hora de desplegar sus dotes musicales pero a la hora de vestirse sólo parece una mala imitación de Lady Gaga. Eso ya es demasiado…
Taylor Momsen. La actriz de Gossip Girl es bella, joven y súper talentosa. Pero tiene un problema: se destaca por su total fidelidad al estilo gótico, al que no abandona bajo ninguna circunstancia. Siempre oscura, abusa del portaligas, el delineador negro y faldas híper cortas.
Lindsay Lohan. Rebelde, escandalosa y mal vestida, todo junto en una misma persona. Además de haber pasado por el peor año de su vida (hasta estuvo presa) su vestuario se destacó por los brillos ilimitados, modelos indefinidos entre lo elegante y lo vulgar, escotes que no la favorecen en absoluto y una cabellera demasiado cambiante.
Kim Kardashian. Haciendo todo un culto de sus
curvas apuesta a outfits extremadamente ajustados y llamativos. En general, lo que empeora la situación es la mezcla de texturas, colores y el casi abuso del animal print en leopardo en los accesorios.
Paris Hilton. El mejor ejemplo de que dinero y elegancia a veces no van de la mano. La riquísima heredera del imperio hotelero es la reina del anti-look. Mezcla estilos, texturas y colores sin ningún tipo de criterio y se excede en el uso de joyas y complementos. En este caso, definitivamente y como dice la canción, el lujo es vulgaridad.

1 comentario:

  1. Completamente deacuerdo! Una cosa es ir extravagante, atrevida y rompedora a lo lady Gaga, otra tomar un look de guerrera de mercadillo a lo Kesha y otra muy distinta es ir hecha una piltrafa a lo Lindsay Lohan! Que por otro lado me cae muy bien! ;)
    Aquí hay más modelitos extravagantes, http://on.fb.me/dK94Ua
    No os perdais a Willow Smith, va hecha un primor!

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