EL CLIMA

sábado, 1 de enero de 2011

Monica farro le confeso a la revista caras, que ya no duerme sola.




Apenas dos años después, Mónica Farro (34) se convertiría en madre de Diego (17) y atravesaría el duro camino del destierro de su Uruguay natal para acompañar a su esposo en su carrera deportiva. Lejos de sus seres queridos y sus amistades, la vedette enfrentó exitosamente las pruebas que la fortuna puso en su sendero. Pero la dotó de una inevitable cuota de autosuficiencia que hoy se convirtió en una dificultad para lograr la estabilidad emocional en el amor. "Soy demasiado fuerte, tanto o quizá más dominante que un hombre y eso les molesta a mis parejas. Estoy tan acostumbrada a luchar sola, a mantenerme y sobrevivir, que ya no espero nada de nadie y me cuesta mucho poder relajarme. Tiene que tener mucha seguridad un hombre para poder bancarse estar a mi lado. Ser pareja mía, no es para cualquiera. Y ahora ya no duermo sola ", confiesa la primera vedette de la obra "Bravísima" quien tras cinco meses se reconcilió con su joven novio, el productor de "ShowMatch", Jorge Luengo (25). Durante el impasse, Farro no pudo rehacer su vida sentimental e intenta justificar el por qué. "No se me acerca nadie, no sé si es porque me tienen miedo, si temen que los rechace, si me tienen demasiado respeto o no les gusto (Risas). Es muy difícil que un hombre me quiera seducir", afirma la uruguaya antes de subirse a las tablas del teatro Atlas, de Mar del Plata.

No hay comentarios:

Publicar un comentario