EL CLIMA

miércoles, 29 de diciembre de 2010

A VER ESAS SILLAS



INFORME SILLAS
Las mayores distancias entre sentados pueden reducir el nivel de ruido en las llamadas telefónicas.

Cara a cara o espalda con espalda?
Mucho más que una cuestión de visuales!

Una silla ergonómica para la oficina? Claro que la tengo! El espacio de trabajo propio, configurado funcionalmente? Desde luego. Una distribución de la oficina que permita indistintamente la labor de equipo y el trabajo individual concentrado? Pues, esteee…
Las personas son al mismo tiempo individuos y seres sociales, y eso se nota. También en la oficina: a menudo se utiliza no sólo un puesto de trabajo determinado, sino un espacio común que exhibe una multiplicidad de puntos de contacto, incluso con sus colegas. Una configuración consciente de la distribución de la oficina bajo observancia del punto de vista sociopsicológico, puede influir positivamente en el bienestar y la productividad.


Comunicación y concentración

Cercanía y distancia, tensión y distensión, comunicación y concentración, constituyen los polos entre los cuales se mueve el trabajo en las oficinas. En función de las actividades y necesidades de cada oficina, corresponde lograr el equilibrio correcto a través de la configuración del espacio. Así, la distribución de la oficina juega un papel preponderante.

La disposición clásica 'cara a cara' en el puesto de trabajo doble (distribución en T) y la disposición de asientos 'espalda con espalda' (distribución en U) presentan cualidades completamente diferentes. La posición 'cara a cara' es maravillosa cuando no es forzada, sino que expresa una interacción activa y positiva allí donde se desee la comunicación. Pero nada distrae más a las personas que otras personas. Un ordenamiento 'espalda con espalda', por el contrario, logra un ambiente 'protegido', allí donde se requiere recogimiento y trabajo concentrado.


Comunicación querida y no querida

En el complejo mundo de la oficina actual existe una alta necesidad de acuerdo, reunión e intercambio de información, que por su parte posibilitan un trabajo de oficina racional. Pero la apertura de todos los canales de comunicación, de modo que cualquiera pueda tener contacto sin impedimentos con los demás, ya sea visual, acústico o gestual, podría ser sumamente molesta. Distracción en el trabajo, o un total impedimento para el mismo. Si los empleados se sientan enfrentados, con distribución en T, entonces se hacen inevitables las influencias y molestias recíprocas. Tiene lugar una diversidad de intercambios de miradas y observaciones a menudo inconscientes, con las consecuentes interrupciones del trabajo.

Sin embargo, los trabajos concentrados requieren un máximo de tranquilidad, como por ejemplo, trabajar en una pantalla, investigaciones comerciales y técnicas, tareas de control delicadas o negociaciones al teléfono.

Estudios del Instituto Fraunhofer para la Economía y la Organización Laboral ponen en evidencia que la distribución en T con la posición sentados 'cara a cara' ocasiona hasta tres horas diarias de influencias molestas como resultado de llamadas telefónicas y reuniones. Estudios de Refa comprueban que en la distribución en T un 60% de los empleados se quejan de un alto nivel de ruido en la oficina.


La difícil elección

Sin duda: la oficina es hoy en día un lugar con un espectro de actividades desacostumbradamente amplio. Por consiguiente, no existe una única distribución de oficina adecuada. Al escoger la distribución correcta, se deberá atender la diversidad de tareas, las estructuras disponibles y, fundamentalmente, las aspiraciones y necesidades humanas. Sólo así se puede planificar un aprovechamiento óptimo de las superficies de oficina, y promover la efectividad, salud y motivación de los empleados y empleadas.


En síntesis

El 'cara a cara' tradicional: A pesar de los desarrollos dinámicos en el tema configuración de oficinas, el aprovechamiento de los espacios de oficina se sigue orientando a la distribución en T. La clásica disposición en bloque 'cara a cara' en el puesto de trabajo doble tiene una larga tradición: retrotrae a buenas épocas en las cuales dos personas estaban de pie frente a un pupitre doble, aprovechando el mismo tintero. Esta disposición se adecua para la comunicación buscada, pero promueve también los contactos no deseados, y por tanto, en lo relativo a la ausencia de molestias ópticas y acústicas, le va a la zaga a la distribución en U.


El distendido 'espalda con espalda': Esta posición de sentado posibilita un trabajo concentrado y sin interrupciones. Las mayores distancias entre sentados pueden reducir el nivel de ruido en las llamadas telefónicas. También se reducen las influencias molestas en las reuniones con terceros. Al configurar una oficina con distribución en U, sin embargo, no se puede subestimar el instinto básico de la persona, que siente la necesidad de una espalda protegida. A nadie le gusta sentir que, de repente, alguien está parado detrás de uno. Tan sólo la eventualidad de que tal situación pudiera ocurrir, tiene el efecto de hacernos sentir mal. Un sentimiento de respaldo nos confiere mayor seguridad psicológica. Por tanto, en la distribución en U se deberá configurar esmeradamente el área interior. La calidad de la distribución en U se incrementa sensiblemente, cuando la zona a espaldas de los empleados está protegida y delimitada, por ejemplo, con sideboards. Además, los armarios en la espalda brindan no sólo un espacio suficiente para el almacenamiento individual y la documentación tan necesaria, sino que se adecuan, con la altura correcta, para lograr conversaciones informales con el colega, aunque sea de pie. Cubra su espalda, se lo agradecerá.

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