ABEJAS AFRICANAS
Las abejas “llegan volando” al puesto 3 de los animales asesinos. Para ser más precisos, las abejas africanas, comúnmente conocidas como las abejas asesinas. Luego de casi 3 décadas de ser liberadas accidentalmente en Brasil, llegaron a los Estados Unidos en 1990 y con ellas arribaron la histeria colectiva y el temor.
Por su aspecto es muy difícil diferenciar a las abejas africanas de sus primas, las europeas. El Especialista en Desalojo de Abejas Africanas (oficio particular, si los hay), Dereck Taylor, afirma que cuando se la molesta a la abeja reina europea, esta envía a no más de 30 obreras a atacar a corta distancia. Pero la africana envía a la mitad de la colonia, por lo que puede haber hasta 3.000 abejas en el aire. En 1.000 aguijones hay suficiente veneno como para matar a un ser humano; por eso es explicable la ansiedad de la gente por sacar un panal del patio de sus casas.
Las abejas africanas son más agresivas que las europeas porque en su hábitat natural hay más enemigos buscando su apetecida miel, por lo que desarrollaron más mecanismos de defensa. Sin embargo, las abejas europeas pueden ser igual de letales para los humanos: más de 2.000.000 de estadounidenses son alérgicos a la picadura de las abejas y un aguijón puede matar en 5 minutos.
Muchas personas no saben que son alérgicas a las picaduras de las abejas hasta que es demasiado tarde para salvar sus vidas. Para colmo de males, es muy difícil diagnosticar una reacción alérgica por picadura de abejas, porque se suelen confundir los síntomas con los de un ataque cardíaco o un derrame cerebral. Como podemos apreciar, no sólo las abejas africanas pueden matar gente. Entonces, porque debido a este insecto, 1.500 personas mueren al año en todo el mundo, las abejas ocupan el puesto número 3 en animales asesinos.
Las abejas “llegan volando” al puesto 3 de los animales asesinos. Para ser más precisos, las abejas africanas, comúnmente conocidas como las abejas asesinas. Luego de casi 3 décadas de ser liberadas accidentalmente en Brasil, llegaron a los Estados Unidos en 1990 y con ellas arribaron la histeria colectiva y el temor.
Por su aspecto es muy difícil diferenciar a las abejas africanas de sus primas, las europeas. El Especialista en Desalojo de Abejas Africanas (oficio particular, si los hay), Dereck Taylor, afirma que cuando se la molesta a la abeja reina europea, esta envía a no más de 30 obreras a atacar a corta distancia. Pero la africana envía a la mitad de la colonia, por lo que puede haber hasta 3.000 abejas en el aire. En 1.000 aguijones hay suficiente veneno como para matar a un ser humano; por eso es explicable la ansiedad de la gente por sacar un panal del patio de sus casas.
Las abejas africanas son más agresivas que las europeas porque en su hábitat natural hay más enemigos buscando su apetecida miel, por lo que desarrollaron más mecanismos de defensa. Sin embargo, las abejas europeas pueden ser igual de letales para los humanos: más de 2.000.000 de estadounidenses son alérgicos a la picadura de las abejas y un aguijón puede matar en 5 minutos.
Muchas personas no saben que son alérgicas a las picaduras de las abejas hasta que es demasiado tarde para salvar sus vidas. Para colmo de males, es muy difícil diagnosticar una reacción alérgica por picadura de abejas, porque se suelen confundir los síntomas con los de un ataque cardíaco o un derrame cerebral. Como podemos apreciar, no sólo las abejas africanas pueden matar gente. Entonces, porque debido a este insecto, 1.500 personas mueren al año en todo el mundo, las abejas ocupan el puesto número 3 en animales asesinos.
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