EL CLIMA

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domingo, 2 de septiembre de 2012

JUICIOS DE SALEM


Los juicios por brujería de Salem fueron una serie de audiencias locales, posteriormente seguidas por procesos judiciales formales, llevados a cabo por las autoridades con el objetivo de procesar y después, en caso de culpabilidad, castigar delitos de brujería en los condados de Essex, Suffolk, y Middlesex (Massachusetts), entre febrero de 1692 y mayo de 1693. Este acontecimiento ha sido usado retóricamente en la política y la literatura popular como una advertencia real sobre los peligros del extremismo religioso, acusaciones falsas, fallos en el proceso y la intromisión gubernamental en las libertades individuales.1
A pesar de ser generalmente conocido como «los juicios de Salem», las audiencias preliminares en 1692 se llevaron a cabo en diversas ciudades de toda la provincia: la aldea de Salem, Ipswich, Andover y la ciudad de Salem. Los juicios más conocidos tuvieron lugar en la ciudad de Salem, realizados por un Tribunal de Oyer and terminer en 1692. Más de 150 personas fueron detenidas y encarceladas, solo con acusaciones, sin embargo no llegaron a ser formalmente procesadas por el tribunal del condado. Al menos cinco de los acusados fallecieron en prisión y las veintiséis personas que fueron a juicio fueron condenadas ante este tribunal. Un rasgo particular de estos juicios fue que las denuncias de alucinaciones y contactos demoníacos surgieron entre un grupo de mujeres de la comunidad de Salem pero nunca se realizaron procedimientos serios para obtener pruebas de tales prácticas, sino que casi todas las acusaciones se basaban en rumores y chismes. Los propios jueces se dejaron llevar por la histeria religiosa de la comunidad de Salem, formada mayormente por puritanos, que exigía frenéticamente condenas a las presuntas brujas.
Las cuatro partes en las que se dividió la Corte Superior de la Judicatura de 1693 se celebraron en la aldea de Salem, Ipswich, Boston y Charlestown, pero solo se produjeron tres condenas de los treinta y un juicios llevados a cabo por la Corte Superior de Judicatura. Los dos tribunales condenaron a veintinueve personas por brujería. Diecinueve de los acusados —catorce mujeres y cinco hombres— fueron ahorcados. Un hombre, Giles Corey, se negó a emitir declaración y murió lapidado en un intento de obligarlo.

Muchas teorías han intentado explicar por qué la comunidad de Salem explotó en ese delirio de brujas y perturbaciones demoníacas. La más difundida insiste en afirmar que los puritanos, que gobernaban la colonia de la bahía de Massachusetts prácticamente sin control real desde 1630 hasta la promulgación de la Carta Real de Massachusetts en 1692, atravesaban un período de alucinaciones masivas e histeria provocadas por fanatismo religioso.
La mayoría de los historiadores modernos encuentran esta explicación, cuando menos, «simplista». Otras teorías se apoyan en analizar hechos de maltrato de niños, adivinaciones invocando al maligno, y ergotismo (intoxicación plena con pan de centeno fermentado que contiene elementos químicos similares al alucinógeno LSD), la lucha por las propiedades, el complot de la familia Putnam para destruir a la familia rival Porter, y algunas otras aluden al tema del «estrangulamiento social» de la mujer, siendo que la suma de estos factores causó el estallido de fanatismo religioso.
Dentro de la pequeña comunidad de Salem existía una estricta conducta religiosa, en la cual cada persona vigilaba a sus vecinos y a su vez era vigilada por éstos en sus palabras y acciones, generando dudas y sospechas en caso de que su conducta no se ajustase a los parámetros religiosos puritanos. Las mujeres eran consideradas como individuos destinados a servir a sus esposos y a carecer de mayores derechos, mientras los niños eran destinados a educarse severamente desde temprana edad en las labores de los adultos en vez de simplemente jugar. Otra preocupación fundamental de esta comunidad era evitar la «ira de Dios» y, por tanto, sujetarse estrictamente a los dictados religiosos del puritanismo para así evitar el castigo divino que se traducía en pérdida de cosechas, mal clima, y muerte de ganado.
El número de acusados por brujería en estos juicios pudo fluctuar entre 150 y 200, e incluso un número mucho mayor si se tienen en cuenta los apresamientos que no fueron seguidos de acusaciones formales. Los acontecimientos en los juicios tuvieron una profunda influencia en la región y pudieron contribuir al deterioro de la influencia de los puritanos en el gobierno de Nueva Inglaterra.

martes, 26 de abril de 2011

BUUUUUU

BRUJAS DE SALEM
Antes de decir cualquier cosa sobre los extraordinarios hechos ocurridos en Salem debo de ubicarles en el lugar específico donde se encuentra este pueblo. Salem, ahora conocido como Danvers, se sitúa en la bahía de Massachussets, Estados Unidos (conocida en aquel tiempo como “la nueva Inglaterra”.
Salem nunca fue un pueblo de acción y los colonos ingleses que se habían establecido allí impusieron el cristianismo, por lo tanto las actividades ejercidas por Tituba, criada del ministro-reverendo Samuel Parris, para entretener a las niñas Betty y Elizabeth Parris, y Abigail Williams (hijas y sobrina del reverendo), fueron mal vistas por el pequeño pueblo.
Tituba sabía leer la fortuna e impresionablemente la clara del huevo. Esta ultima consistía en echar agua y la clara de un huevo en un vaso de cristal que contuviera una vela encendida dentro, para poder ver la silueta del futuro esposo en el humo de la vela cuando esta se apagara. Según otras fuentes utilizadas para la investigación, solo Tituba y la anciana Martha Cory eran las únicas capaces de realizar con exactitud este acto.
Poco a poco la actitud de las niñas Parris iba cambiando. Según algunas crónicas la primera comenzaba a llorar sin motivo, mientras la otra corría en cuatro patas y ladraba como perro. Otras chicas también se comportaban de forma extraña, como por ejemplo, Ann Putman, de 12 años, quien declaró ante la corte que había peleado con una bruja que había intentado decapitarla.
Un tiempo después Tituba declaró que era una bruja, y que uno de sus espíritus había atacado con un cuchillo a Ann Putman intentando decapitarla. También dijo que ella no era la única bruja en Salem y acusó a las niñas Parris de ejercer esta actividad.
Por otro lado las niñas Parris declararon que obraban obligadas por Satanás, y que ellas podían reconocer a los que practicaban la brujería y de esta manera “ayudar“ a los ministros a capturar a los “enemigos”. Así que las chicas Parris se dedicaron a acusar a todos a quienes ellas querían, incluyendo al esposo de Tituba, al cual acusaron de elaborar un pastel con harina de centeno y orina de niño. Esto último nos deja ciertas dudas por la ausencia de pruebas físicas.
En una audiencia celebrada en marzo de 1963 se descubrieron muchas cosas. Por ejemplo, Tituba declaró sobre la existencia de un hombre alto de Boston, el cual fue identificado como Jhon Proctor, el cual poseía el libro sagrado, un libro que contenía los nombres de todos los brujos y brujas que habitaban el Salem. También se descubrió que Proctor tuvo un romance con Abigail Williams, cometiendo así adulterio contra su esposa, Elizabeth Proctor, quien fue acusada de brujería por Abigail antes del arresto de Proctor, aparentemente por celos.
Otro acusado fue Giles Cory, de 80 años, quien se negó a declarar cuando se le acuso a él y a su esposa, Martha Cory, de brujería. Murió aplastado con piedras por los guardias encargados de hacerlo hablar. A este brutal sistema se le conocía como “el detector de mentiras” y se utilizaba de la siguiente forma:
Se amarraba al acusado a cuatro postes a unos centímetros del suelo y se le iba haciendo preguntas, si este no contestaba se le colocaba una enorme y pesada loza de piedra sobre la espalda; mientras el acusado se siguiera negando a declarar se le seguiría agregando mas lozas. Si el acusado sobrevivía dos días a esta masacre se le consideraba inocente, pero como es de suponerse nadie lo logró, lo que según los ministros demostraba que todos los acusados eran culpables.
Como solo los que se negaban a declarar eran ejecutados Tituba se salvó y luego fue vendida por Parris.
En siete años fueron ejecutados siete hombres, trece mujeres, doscientas personas fueron arrestadas y doscientas mas habían sido acusadas por las niñas Parris. Nadie fue quemado en la hoguera como se cree. Cuatro años después de los juicios de Salem, los jurados firmaron una confesión de error y suplicaron clemencia, esto causó un gran alboroto en la sociedad, pues esto fue la prueba de que muchas personas inocentes habían muerto sin razón.
Catorce años mas tarde Ann Putman declaró que había obrado engañada por el diablo, pero a de entenderse que si ella sabía con quien estaba tratando, debió de imaginar las consecuencias que esto traería.
Como anteriormente mencioné que muchas personas murieron en esta casería, he aquí los mas destacados:
  • George Burroughs : antiguo reverendo de Salem. Fue acusado de ser el jefe de las brujas y murió ahorcado.
  • Alice y Mary Parker: hermanas que practicaban los ritos con Abigail y las otras. Murieron ahorcadas el 22 de septiembre de 1692.
  • Elizabeth Proctor: esposa de Jhon Proctor. Se encontraba embarazada en el momento que la apresaron, siendo acusada de ejercer la practica de brujería. No fue ejecutada, pero fue sentenciada a cadena perpetua.
  • Jhon Proctor: portador del libro sagrado e incentivador a practicar la hechicería. Cometió adulterio con Abigail Williams, y murió ahorcado.
  • Abigail Williams: sobrina del ministro Samuel Parris y amante de Proctor. Fue condenada un 6 de septiembre.
  • Giles Cory: murió aplastado en el “detector de mentiras”por defender a su esposa y no declarar ante la corte.
  • Martha Cory: murió un 22 de septiembre. Era esposa de Giles Cory. Fue acusada de brujería y de enseñar a Tituba a leer la clara de huevo.
Lo que me motiva a escribir sobre esto es la intensidad del tema y el indescriptible interés que despierta en mí. Además este Tema me da a conocer las creencias que tenían las personas de otros pueblos o países en este caso Salem, siglos antes y como reaccionaban en situaciones como estas.
Es importante destacar que lo que empezó como un juego para las niñas Parris marcó un punto muy importante en la historia. Las consecuencias que dejaron sus actos fueron muy grandes, pues por ellas murieron cientos de inocentes.
Ahora existe mucha diferencia, en la sociedad, con respecto al satanismo o brujería que en aquella época, antes ser acusado o acusada de hechicería era lo peor que existía, ahora en cambio esto no le interesa a nadie e incluso causa admiración en los que creen.