EL CLIMA

domingo, 9 de diciembre de 2012



















Un domingo muy apreciado amado lector, y vamos que cuando nos queramos acordar
nos vamos a estar metiendo nomas, en la segunda mitad de diciembre que va a ser
cortita eh, porque a partir del dia 21, en el cual en el hemisferio sur le damos la 
bienvenida oficial al verano, comenzamos con la carrerita de las fiestas y del fin de año.
De hecho habra muchos que estaran ansiosos por saber, por enterarse, que cosas
vendran.
Pone tu vista en los objetivos, tene fe, despojate de los miedos, ese es el mejor mensaje que este editor te puede dar, que le puede dejar a tu corazon.
Mira hacia alrededor, y mira hacia adelante, ¿sabes que hay un monton de cosas que
todavia ni siquiera se empezaron a hacer?, y son cosas que prometen y mucho eh,
cosas que pueden trascender, y sernos de gran provecho.
Tenemos una nueva semana por delante, y por favor, pensemos en cambios,
pensemos en renovacion, vamos a entender que hay cosas, incluso personas
que ya cumplieron sus ciclos, pensemos en aire fresco, caras nuevas, nuevas
iniciativas y emprendimientos, vamos a mirar el año que viene, con ojos de
comienzo, y todo comienzo, trae aparejada su impronta alegre, porque
sabemos que algo nuevo se genera, sabemos que algo nuevo amanece, que
algo nuevo, se manifiesta delante de nuestros ojos y desde alli, se transmite
crece, y se reproduce.
El lunes mas caravana, besooos LC.  



¿Qué es lo que diferencia a las personas verdaderamente ricas de las personas pobres y la gente de clase media?

¿Qué es lo que marca la diferencia entre quienes alcanzan sus metas y quienes siempre viven una vida de fracasos constantes?

La respuesta es simple: Los Hábitos.

Hábitos negativos te hacen pobre, gordo, fracasado y mediocre… Hábitos positivos te hacen rico, atractivo, saludable, exitoso y triunfador.

Es indispensable considerar que sin los buenos hábitos, muchos de los grandes personajes de la historia, no hubiesen sido tan grandes después de todo.

La persistencia, el cuidarse a sí mismos y el tener tiempo para uno mismo son sólo algunos de los conceptos valiosos que podemos considerar en nuestro camino para mejorar totalmente la manera como vivimos.

Es claro que si continuamos haciendo las mismas cosas, obtendremos los mismos resultados. Y esto estará bien, si los resultados que estamos obteniendo son buenos.

Por ejemplo, si un emprendedor está alcanzando sus metas personales y logrando sus propósitos, no hay un mejor indicador para hacer notar que sus hábitos están bien alineados con la plenitud.

Pero si por el contrario, por más que lo intenta no logra salir de sus problemas, entonces hay cosas por cambiar.


Hábitos Positivos
El problema, sigue siendo el orgullo de la gente. En ocasiones las personas son tan orgullosas, que no ven que necesitan cambiar, y no se dan cuenta que efectivamente están llevando una vida mediocre.

Y no sólo la mediocridad es el problema, el problema es la mentalidad destructiva y negativista que termina por contaminar a los demás.

La mejor manera de cambiar nuestras vidas para mejorar, es simplemente realizar un análisis de aquellas cosas que andan mal, y sacar una lista con todas las posibles mejoras.

Esta lista, no debería ser de menos de 10 elementos, si así lo es, hay dos posibilidades: (1) que tienes una vida bastante óptima o (2) que estás practicando el autoengaño.

Sinceramente, no es imposible llegar a la primera de estas posibilidades, la cuestión es que el camino del Desarrollo Personal siempre tendrá para nosotros, alternativas y oportunidades de crecimiento, sin importar qué tanto hayamos mejorado.

Y esto es algo maravilloso de la vida, muchos se desmotivan, por el hecho de que piensan que deben terminar en algún momento su proceso de crecimiento.

Pero en vez de eso, yo personalmente veo todo este camino como una serie de eventos que pueden disfrutarse al máximo uno a uno. Esto sólo se logra, con la creación y optimización de Hábitos Positivos




Tener éxito, personal y profesionalmente, es sinónimo de alcanzar los objetivos que te habías propuesto (o que en el trabajo te habían marcado).

A nivel profesional, tod@s tenemos objetivos que alcanzar ¿Qué puedes hacer para llegar a ellos antes y mejor?

¡Buena pregunta! Si sigues leyendo, en este post te mostraré una de las cosas que puedes hacer para lograrlo.

Uno de los mayores obstáculos en el trabajo profesional a la hora de conseguir tus metas es caer en la tentación de la distracción: Querer estar en todo, tener nuestra atención dispersa en múltiples asuntos… y por lo tanto en nada.

Y es que realmente, tu día a día está lleno de distracciones y si no tomas precauciones puedes estar súper ocupad@ haciendo mil tareas, pero no habiendo hecho nada realmente productivo.

Es necesario que una vez hayas determinado lo que quieres alcanzar (los objetivos de ese día) y te pongas a trabajar, te enfoques y te centres 100% en ese trabajo, evitando distracciones y dispersiones, si no lo hacemos así -yo también me incluyo- nos puede pasar como al personaje de nuestra historia de hoy…

EL LADRÓN “DISPERSO”

Un ladrón entró a robar en la casa de uno de los comerciantes más prósperos de Parí­s aprovechando que los dueños pasaban fuera esa noche.

Lo tení­a todo calculado, tenía claro “su objetivo”, iba a realizar una “faena” limpia y rápida.

Entró en la casa, de varios pisos, y poco a poco conforme avanzaba dentro de la mansión, iba quedándose absorto al observar todos los objetos de arte y de incalculable valor que habí­a en su interior.

Candelabros de oro y plata por todas partes, vajillas de porcelana china, cerámica italiana, alfombras turcas, una biblioteca con libros rarí­simos y que debí­an cotizarse enormemente, un extraordinario piano de cola y cuadros que… no podí­a creerlo eran de los más famosos pintores flamencos ¡un auténtico tesoro!

Pero habí­a más, porque la primera y segunda planta no desmerecí­an a la principal…

El ladrón subí­a y bajaba, se detení­a delante de una pintura, la descolgaba, pero se daba cuente de otra que habí­a en otra planta de igual o superior valor, subí­a y también la descolgaba, dudaba, metí­a ese cuadro en el “saco”, …luego lo sacaba y lo cambiaba por otro…

Y nuestro personaje entre sus dudas, sus distracciones debido a las veces que se quedaba admirando los objetos de valor de la casa, y con su “decisión” de estar en todas partes, subiendo y bajando alturas, pero habiendo perdido de vista su “meta clara y concreta”, se le pasó la noche en un abrir y cerrar de ojos, y de pronto ¡se le hizo de dí­a y fue atrapado por la policí­a que circulaba por el barrio!

¡CLARO!

Tú puedes mejorar enórmemente tu eficacia en tu trabajo si decides enfocarte en las tareas que debes realizar, en las metas que tienes que alcanzar, una a una, y tomas la decisión de eliminar distracciones y dispersiones.

A continuación te presento 3 Pasos concretos, que si los das doblarás tu productividad en el trabajo:

Paso 1: Antes de comenzar el día, termínalo (idea de Jim Rohn).

Es decir, antes de acostarte debes tener claro, y por escrito, cuál es la meta más importante a alcanzar del día siguiente, y ese trabajo -para alcanzar esa meta- es súper eficaz que te lo hayas programado -en la medida de lo posible- a primera hora de la mañana.

Además, es muy útil que tengas el resto del día previsto y planificado, con espacios de tiempo libres para imprevistos que -como bien sabes- suelen aparecer sin previo aviso.

Paso 2: Libérate de la tiraní­a de tu correo electrónico y de otras distracciones electrónicas

Cómo dice Tim Ferris: “No  mires el correo electrónico a primera hora de la mañana ni a última hora de la noche. Lo primero complica los planes que tení­as y tus prioridades, y lo segundo te producirá insomnio.  El correo electrónico puede esperar hasta las 10 de la mañana, después de que hayas terminado al menos una de las tareas importantes del dí­a.”

Más aún… no leas el correo electrónico cada “dos por tres”; hazlo en «tandas» a unas horas concretas. Desengánchate de mirar cada cinco minutos tu e-mail y céntrate en realizar tus tareas importantes y planificadas, en lugar de responder a emergencias imaginarias. Lee el correo tan sólo dos o tres veces al día.

Y utiliza este mismo criterio para otras “tentaciones on line” como facebook, twitter, etc. Las redes sociales son muy interesantes y útiles, pero con un orden.

Paso 3: Pon orden en tu mesa de trabajo y despacho

Esta es una pequeña labor diaria que te ayudará a ser superproductiv@. Un buen hábito es ir ordenando sobre la marcha, y que reserves los diez últimos minutos antes de irte del trabajo a ordenar tu zona de trabajo.

Tener la mesa llena de papeles y desordenada sólo lleva a que tú mism@ te vayas interrumpiendo el trabajo porque permites obstáculos fí­sicos en el mismo.

Como decí­a San Agustí­n: “Cuida el orden y el orden cuidará de ti.”




He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño, por primera vez, el dedo de su padre, lo tiene atrapado por siempre.
Gabriel García Márquez



Muchas personas están demasiado educadas para hablar con la boca llena, pero no les preocupa hacerlo con la cabeza hueca.
Orson Welles


Cuando una puerta se cierra, otra se abre, pero a menudo vemos tanto tiempo y con tanta tristeza la puerta que se cierra que no notamos otra que se ha abierto para nosotros.
Alexander Graham Bell.

No hay comentarios:

Publicar un comentario