EL CLIMA

jueves, 12 de enero de 2012

GATOS CONDUCTA



Sumamente expresivos y fascinantes, los gatos tienen muchas maneras de comunicarnos su estado de ánimo y necesidades. Pueden hacerlo mediante sonidos, o simplemente con la forma de mover su cuerpo.

Existen tres grandes tipos de sonidos que emiten los gatos. Un sonido grave y de baja intensidad, es el que utilizan cuando necesitan algo, por ejemplo, tienen hambre o quieren salir. En la época de celo, el sonido que más utilizan es bastante molesto: el maullido, prolongado, fuerte, y en determinadas horas (noche) sumamente intenso. En la hembra, durante el apareamiento, estos gritos son parte del ritual. La hembra le indica al macho el fin de la cópula, con un aullido típico. El ronroneo, en general es un sonido que emite mostrando bienestar. De todos modos, si el animal está dolorido, también puede hacerlo.

El lenguaje corporal tiene un repertorio amplio y complejo. La postura de la cabeza nos revela su carácter. Erguida en los animales dominantes, y agachada en los más tímidos. Comúnmente frotan esta parte del cuerpo en las personas de la familia, y aún en los desconocidos. Como veíamos en un post anterior, lo hacen para marcar territorio. Una conducta bastante curiosa que se ve en muchos gatos, es que ante un grupo de personas que no conoce, se acerca más a quienes permanecen indiferentes a su presencia.Si ya tienes un gato, comprobarás que esta es una conducta típica. Si aún no lo tienes y estás pensando en tenerlo, te será muy útil conocer de antemano su lenguaje.

La mirada de los gatos es un punto importante. Pocos mamíferos sostienen tanto la mirada, sobre todo con los humanos. Muchas personas interpretan esta conducta como desafío, pero no Tal vez la expresividad de los gatos fundamente la fascinación o el rechazo que provocan. Así como en Egipto eran considerados animales sagrados, no hay duda que muchas personas tienen un fuerte rechazo por estos animales. Desafiantes, independientes, estos animales se expresan como pocos.

La postura de las orejas nos muestra su grado de bienestar o enojo. En el primer caso las coloca hacia arriba, y en el segundo inclinadas hacia delante. Si tiene los bigotes hacia adelante y firmes, está contento, pero si tiene miedo, los mueve hacia atrás. La boca abierta no es buena señal: es que está enojado.

Pero la cola es la que más nos revela acerca del estado de ánimo y necesidades de nuestro felino. Cualquiera que tenga un gato habrá notado que sus movimientos responden muy bien a sus estados de ánimo. Si la baja, no se siente bien. Algo le duele, o está triste, por lo que debemos estar muy atentos. Los movimientos suaves muestran bienestar, ganas de jugar o concentración.

Si la cola está erguida, debemos ver qué sucede con el extremo. Si está quieto, necesita algo (por ejemplo, tiene hambre); si permanece móvil, está muy contento. El problema es si la mueve velozmente: está muy enojado. Pero si además de eso, se arquea y para los pelos de la cola (lo que da una aspecto mucho mas voluminoso) o el lomo, la posibilidad de ataque es casi inminente.

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