EL CLIMA

domingo, 10 de abril de 2011

EL PUERTO DE BUENOS AIRES




El Río de la Plata es un protagonista importante de la historia de la ciudad de Buenos Aires, su puerto fue el acceso exclusivo a la urbe desde otras partes del mundo desde su fundación hasta la creación de la vía aérea. Toda la historia del país transcurrió alrededor de la importancia de los muelles porteños. Desde la pre-colonia hasta la formación de la República, el Puerto de Buenos Aires es la causa y el efecto de esta historia., la ciudad se fundó por y para el río y vivió desde sus orígenes a causa del río y por su posición en él. La primera fundación de Buenos Aires fue realizada por el adelantado Pedro de Mendoza en el año 1536, quien llegó desde España buscando un camino que condujese a riquezas en oro y plata. El adelantado nombro a las tierras “Puerto y Real de Nuestra Señora Santa María de los Buenos Aires”. La expedición había partido el 24 de Agosto de 1535 y en Febrero de 1536 las embarcaciones menores entraron en el “Riachuelo de los Navíos”, en cuya margen fundó el adelantado la ciudad. En el punto indicado construyese una iglesia, una casa para el adelantado y numerosas chozas.
La población se asienta en forma precaria debido a la carencia de materiales para construcción, a la escasez de alimentos del lugar y a los permanentes ataques de los aborígenes que sitian la ciudad provocando hambrunas a los españoles.
De esta misma expedición partieron los exploradores que remontaron río arriba y en 1537 fundaron Asunción, que prontamente demostró mejores condiciones. En1541 se decidió por fin levantar la población y los escasos residentes de Buenos Aires se trasladaron a Asunción.
De allí partió la expedición que realizó la segunda y definitiva fundación, realizada el 11 de junio de 1580 por Juan de Garay que procedió a fundar la Ciudad de la Santísima Trinidad y el Puerto de Santa María del Buen Ayre, enarbolando como lema una frase que señalaba el destino portuario de la Ciudad: "Es necesario que se abran puertas a la tierra y el suelo florezca, que sus frutos sirvan a su pueblo y a otros pueblos de la Tierra". En este caso ya no se buscaba riqueza puesto que ya se conocía lo que deparaba esta geografía fluvial, lo que se quería era ocupar el territorio, de gran importancia estratégica ya que significaba una importante salida al atlántico sur.

Hacia 1606, Santa María de los Buenos Ayres tenía cerca de 600 habitantes, un tercio de la cual eran portugueses dedicados al comercio (por la unión temporaria de las dos coronas) y ya había sufrido algunos merodeos de naves corsarias. Su población practicaba una economía de subsistencia basada en la explotación agrícola, sin producir excedentes por la escasa mano de obra, debido a la poca cantidad de indígenas de la zona.

Por el régimen comercial monopólico establecido por España, Buenos Aires estaba imposibilitada de funcionar como puerto. Sin embargo, por la conveniencia, muchos productos circulaban por este puerto provenientes de las nuevas potencias manufactureras de Europa, así como salía la plata y diversos productos hacia las colonias portuguesas. se calcula que durante los dos primeros siglos el 25% de la plata extraída de Potosí salió en forma ilegal por Buenos Aires, evitando también pagar los impuestos a la Corona.

El Puerto de Santa María de los Buenos Ayres mantuvo su fisonomía original hasta el1607, año en que fueron propuestas las primeras renovaciones destinadas a otorgar un mínimo de espacio de amarre para la descarga de buques. Estas obras consistieron en un muelle de madera junto con varias torres dotadas de defensas de artillería y se emplazaron en la denominada "Guardia del Riachuelo". Posteriormente se introdujeron otras mejoras a las precarias instalaciones portuarias tales como un muelle de atraque en el "Bajo de las Catalinas"

Inicialmente todos estos territorios conformaron la Gobernación del Río de la Plata, dependiente del Virreinato de Perú, con capital en Asunción, pero en1617, viendo la imposibilidad de manejar un territorio tan grande se la separa en dos, poniendo una parte de los territorios bajo jurisdicción de Asunción y dependiendo la otra de Buenos Aires, acrecentando su importancia administrativa de esta manera.

Las primeras descripciones escritas sobre el río corresponden a finales del siglo XVI y a mediados del XVII. El gobernador Pedro Esteban Dávila informaba al Rey de España en 1635 de las características del Puerto y el Río: “... de la dicha isla de San Gabriel se viene a dar fe de este puerto, el cual tiene por frente de la ciudad un banco o bajo de arena que se prolonga desde el riachuelo de los navíos, que es debajo de la ciudad un cuarto de legua hasta lo que llaman de Palermo, que para entrar en este puerto es menester descabezar este bajo y luego se viene prolongando la tierra firme donde esta situada la ciudad entre ella y el dicho bajo; que habrá de canal del banco a la tierra firme media legua, poco más o menos, donde hay tres pozos que sirven de surgidero , el uno enfrente del convento de nuestra señora de la Merced y más adelante hacia el Sud , otro pozo que esta enfrente del fuerte y casas reales, que es en medio de la ciudad, la parte mas eminente y donde esta mejor para ser señor de mar y tierra , y otro mas adelante casi en la boca del riachuelo donde invernan los navíos, que es un estero que tendrá de largo de su principio díez leguas y ancho muy poca cosa, capaz para muchos navíos de hasta 200 toneladas”.

Azcarate du Biscay, un viajero vasco con sobrenombre afrancesado confirma, pocos años después, la descripción del gobernador Dávila, al decir que: “...desde el Montevideo a Buenos Aires aunque hay un canal del lado norte, cuya mayor profundidad es de tres brazas, para mayor seguridad el viaje se hace cruzando frente a Montevideo hacia el canal sur porque es más ancho y tiene tres brazas y media de agua en el lugar menos profundo todo el fondo es fangoso, hasta dos leguas de Buenos Aires donde se halla un banco de arena, allí se toma práctico para ser conducido a un lugar llamado “El Pozo” justamente frente a la ciudad distante un cañonazo de la playa, adonde no pueden llegar más buques que los que tengan licencia del Rey de España; aquellos que no tengan semejante permiso están obligados a anclar una legua mas arriba.”

Como se ve por las descripciones el río frente a la ciudad, por la forma y características de sus fondos, hacía sumamente difícil el acceso por agua hasta cerca de la playa, ya que el frente de la población hacia el río estaba “protegido” por un gran banco de arena, llamado “Banco de la Ciudad”,de unas tres millas de ancho, que impedía el acceso directo, el cual debía hacerse por canales y canaletas que lo rodeaban y atravesaban hasta comunicar las “Balizas Exteriores”, detrás del “Banco de la Ciudad”, con las “balizas interiores” entre el banco y la ciudad, que eran un ancho canal abierto por el Norte pero cerrado al Sur (que es hoy la zona del viejo Apostadero Naval y del Puerto Madero), donde finalmente fondeaban las embarcaciones.

Hacia 1680 la población rondaba los 5000 habitantes. La economía de subsistencia fue evolucionado lentamente, gracias al capital invertido surgido del comercio, y se comenzó a explotar la producción de cueros y en menor medida de sebo y cecina (carne seca) que se obtenía del ganado cimarrón, que en esa época se movía libremente y sin dueño por los campos y era cazado en incursiones llamadas vaquerías. Otro motivo que acrecentó la importancia de la ciudad son las diversas confrontaciones limítrofes con los portugueses. Estos últimos, en ese mismo año, fundan Nova Colonia do Sacramento en la margen opuesta del Río de la Plata, frente a Buenos Aires. Esta ciudad que pasara de manos varias veces en los próximos siglos, contribuyó a desarrollar aún más el contrabando y significó una amenaza a la ocupación española de la región.

Tras el desalojo de los portugueses de la Colonia del Sacramento, se decretó la apertura del puerto para el comercio español en forma exclusiva, disposición que dio impulso al crecimiento portuario e hizo necesaria la creación de la Aduana.

Ya entrado el siglo XVIII, se produjo un cambio dinástico en la Corona española, instalándose la familia de los Borbones (que continúa hasta la actualidad), destacándose Carlos III, que aporta las nuevas ideas de la "Ilustración" europea. Se establece un nuevo concepto de estado para el imperio español, basándose su recuperación principalmente en una nueva relación con las colonias. Se libera el comercio con la metrópoli e incluso con otras potencias y se permite el comercio, antes vedado por aduanas internas, entre las regiones de la colonia, también se subdividen los grandes territorios creándose nuevos Virreinatos y Capitanías. Dentro de este marco la región del Río de la Plata cobra gran importancia como salida directa al Atlántico Sur, por su accesibilidad, por su posición estratégica en el conflicto territorial con Portugal y en el acceso del Cabo de Hornos, ruta al Pacífico que comenzaba a despertar gran interés en las Potencias Europeas.

Es así como en 1776se crea el Virreinato del Río de la Plata, con capital enBuenos Aires, incluyéndose dentro de su jurisdicción grandes territorios, hasta la misma Potosí, que antes estaba vinculada a Lima. En esta época se comienzan a operar grandes cambios en la ciudad, iniciándose la construcción de nuevos edificios. Es también en esta época cuando el desarrollo industrial de Inglaterra comienza a presionar para la ubicación de sus manufacturas y para la obtención de materias primas, comenzando a perfilarse el carácter agroexportador, que luego se perfeccionaría, en la región rioplatense.

El Virrey Cevallos aplicó una serie de reformas fundamentales. Prohibió extraer metales para Lima, iniciando así una política de reacción contra las pretensiones del Perú. A fin de evitar las pérdidas de trigo originadas por el desorden que se advertía en el trabajo, reglamentó las faenas de los peones. La medida fundamental de su gobierno es el auto de 1777 para el comercio libre, por el cual se abrió el Puerto de Buenos Aires. La acción del Virrey Vértiz, que le substituyó, fue variada e intensa. Durante su gobierno se inició un período de renovación

En 1806 Inglaterra decide ocupar el área del Plata, por la importancia comercial del Puerto de Buenos Aires y para paliar la pérdida de sus colonias del norte de América que le proporcionaban materias primas y mercados para sus manufacturas. Con un ejército poco importante ocupan Buenos Aires y contra sus predicciones, los porteños se oponen a esta ocupación y al poco tiempo un ejército armado por criollos, al mando de Santiago de Liniers, recupera la ciudad. Los ingleses preparan más tropas y en 1807 intentan retomarla, ya con un ejército superior pero esta vez se encuentran con una ciudad preparada y son derrotados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario