EL CLIMA

domingo, 20 de febrero de 2011


RACISMO

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En la Argentina se utilizan una serie de términos con una cierta intencionalidad discriminatoria, que conforma un modo especial de racismo. Si bien estos terminos están "inspirados" en una intención racista, la mayoría de ellos se utiliza sin referencia a la raza de una persona; por lo general, estas palabras describen alguna actitud o acción, con un significado que depende del contexto y de los interlocutores. Los defensores de lo políticamente correcto ignoran sistemáticamente la versatilidad de la lengua, que permite que una palabra sea utilizada para distintos elementos. Aún usada en forma discriminatoria, la palabra "negro" no se refiere, generalmente, a la población fenotípicamente africana, de ínfima (pero creciente) presencia en el país- origen de la frase "en Argentina no hay negros". Está claro que los insultos raciales hacia grupos susceptibles a ellos son reprochables y contrarios al desarrollo civilizado de la sociedad, pero la libertad de expresión que es tan importante para ésta permite que un grupo de interlocutores pronuncie esas palabras libremente, con el sentido que desee, mientras que no implique violencia verbal o física hacia una persona o grupo de personas.

«Negro» y «negra»

La utilización de la palabra «negro» y «negra» en forma despectiva está ampliamente difundida en la Argentina, en casi todos los grupos sociales, incluso en aquellos que reciben el mote despectivo de «negro» o «negra» por parte de otros grupos.[10]

Paradójicamente, la misma ideología racista argentina que sostiene que «en Argentina no hay negros»[11] utiliza la palabra «negros» para denominar a una masa mayoritaria de la población integrada por trabajadores, pobres, migrantes internos, inmigrantes latinoamericanos, indígenas, sin demasiada distinción.

Víctor Ramos, presidente de SOS Internacional, responde de este modo a la pregunta de un periodista sobre cuáles son los actos de racismo que se cometen más habitualmente en Argentina:

Yo diría que lo más cotidiano y lo que vemos más frecuentemente nosotros, tiene que ver con un racismo hacia el criollo. Es decir, hacia el también denominado «cabecita negra» o «morocho». Muchas veces suele decirse que en Argentina no hay racismo porque no hay negros... pero acá se discrimina mucho a la persona que tiene la piel oscura e incluso al aborigen que tiene un color de piel más moreno... esto sucede en forma pareja en todas las provincias de nuestro país.
Víctor Ramos[8]

Un ejemplo de este tipo de racismo es la respuesta que un alto funcionario del municipio de Escobar le dio a dos empresarios que querían habilitar una discoteca cerca de la estación ferroviaria:

No quiero ahí negros... Si quiero boliches de negros, los pongo en la colectora, bien lejos.
Clarín, 22 de julio de 2006.[12]

Ariel Armony, un argentino residente en Canadá, donde dirige el Goldfarb Center, dentro del Colby College, ha llamado la atención en 2008 sobre la gravedad del racismo en la Argentina y las divisiones sociales que esto conlleva:

No es novedoso que se hable despectivamente de los «negros» en nuestro país. Lo he escuchado en mi casa, en el club, en la escuela. Lo que sí es nuevo es que se identifique públicamente a los «blancos» como responsables, o al menos cómplices, de la injusticia social. La Argentina intenta seguir viviendo la ilusión de ser un país racialmente homogéneo, mayormente europeo y, por ende, blanco, donde la discriminación no existe... No puedo creer que una persona con un mínimo de dignidad y contacto con la realidad pueda dudar de que la Argentina es un país en el que las divisiones entre «blancos» y «negros» (por más difícil que sea distinguir a veces entre unos y otros) son reales y tangibles.
Ariel Armony

El significado racista del término «negro» muchas veces es utilizado en forma genérica por sectores de clase media o alta para referirse de manera despectiva a las clases bajas y marginales, independientemente de sus rasgos raciales. El prejuicio discriminatorio de estos sectores no reconoce barreras generacionales, ya que pasa de padres a hijos sin que la formación humanística que reciben los más jóvenes desde las instituciones educativas haga algo efectivo para revertirlo.

Una muestra de ello son los comentarios discriminatorios realizados por un adolescente en el Unicenter Shopping de la localidad de Martínez, San Isidro, en la Zona Norte del Gran Buenos Aires, mientras filmaba videos en los que se puede observar un enfrentamiento entre jóvenes de clase media-alta y un niño de clase baja. Estos videos y otros de similares intenciones discriminatorias pueden ser vistos en el portal YouTube. [15]

Es necesario decir que también existe un amplio uso del término «negro» y «negra» con un significado absolutamente fraterno y carente de toda intención discriminadora. Es un apodo muy común entre amigos y familiares. Por ejemplo, los admiradores de la famosa cantante Mercedes Sosa, la nombran cariñosamente como «La Negra»

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